lunes, 28 de febrero de 2011

Pueblos perdidos

Hace unos años aún permanecían en pie las casas. Casi todos se fueron mucho antes, pero aún con las casas hundidas algunos siguen estando ahí: los habitantes más duros, los más perseguidos, aquellos que salían en el crepúsculo o amparados por la oscuridad de la noche.


Algunos se sienten más libres, llegando a hacer cosas que sus antepasados no pudieron, como pasar a diario por el puente principal; en esto cada uno ha ocupado su espacio, el tasugo por arriba y la nutria por debajo. De vez en cuando algún lobo se da un paseo por la calle principal, mientras que los zorros son más asiduos buscando los restos de los almuerzos de los paseantes del fin de semana. Las yeguas mantienen a raya la vegetación que camufla los viejos muros, mientras, otros como la fuina y la paniquesilla rememoran recuerdos de sus abuelos, encames bajo techo, el calor de las chimeneas de leña, despensas y bodegas, ratones por los rincones...recuerdos lejanos que se diluyen bajo el rumor de las aguas del río, ese río del que todos bebieron, beben y beberán.

martes, 1 de febrero de 2011

31 castores capturados

Durante la última campaña de trampeos llevada a cabo en 2010 en el tramo riojano del río Ebro se han capturado 31 ejemplares de castor. Esta especie fue reintroducida de manera ilegal en el año 2003 y en la actualidad está presente en varios ríos de La Rioja, Navarra, Aragón y País Vasco. Las actuaciones de manejo y control del castor están respaldadas por la Comisión Europea y la Comisión de Patrimonio Natural y Biodiversidad.


Según se ha podido comprobar el castor está presente en La Rioja a lo largo de todo el Ebro, aunque las labores de control de los últimos años parecen haber evitado la ocupación y dispersión del pequeño núcleo poblacional de castores que se había localizado en el río Cidacos. La última campaña de control ha terminado con la captura de 31 ejemplares en diversas localidades de la ribera del Ebro (23 machos y 8 hembras) mediante métodos legales de captura en vivo selectivos y no cruentos, a los que hay que añadir otros dos ejemplares que se hallaron muertos de forma natural en Calahorra y Logroño. En el año 2008 solamente se capturaron 3 ejemplares en territorio riojano.

En abril de 2010, la empresa Tragsega, contratada por el Gobierno de La Rioja para capturar a los castores pidió autorización a la Diputación Foral de Álava para poder actuar en la margen izquierda del Ebro, en territorio alavés, por lo que el 26 de abril se concedió ese permiso de captura y retirada de la naturaleza de los animales a través de cajas trampa, lazo de cuello con tope y captura en madriguera, para su posterior traslado al Centro de Conservación de la Naturaleza de La Fombera, del Gobierno de La Rioja, quien decide el futuro de los castores.


Fuente: Agencia EFE y noticiasdealava.com